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MALA PRAXIS POLITICA (I)

  • Foto del escritor: Circo Criollo Revista
    Circo Criollo Revista
  • 2 ago 2019
  • 3 Min. de lectura

El Georgemacrismo.

En el anterior posteo analizábamos la gestión municipal en dos grandes campos, la gestión administrativa y la gestión territorial, indicando que la ideología política de Georgismo Macrista puede comprenderse observando la segunda de ellas, la gestión territorial. (Ver ‘Primer paso en las elecciones’ en el blog circocriollorevistawixsite y en este Facebook)

Y que sobre la primera cuestión podríamos observar tanto cuestiones bien resueltas, como otras deficientes.

En las siguientes notas, nos vamos a detener justamente en las cuestiones de gestión municipal deficientemente resueltas o con políticas erráticas, que revelan, una vez más, un sesgo éticamente cuestionable del Geogemacrismo.

Dice el Georgismo Macrista que “En Vicente López tenemos jardines de infantes y maternales con método Montessori, los resultados de las pruebas Aprender en las escuelas públicas son mejores que en las privadas. Esto demuestra que desde lo público se pueden hacer las cosas bien.”.(Tweet de @jorgemacri del 25 de julio).

Naturalmente estos datos pueden impresionar a quien no este familiarizado con el sistema educativo, como por ejemplo, al propio Intendente. Pero, como es bien conocido, “si Sócrates es pelado y Sócrates es filósofo, no es posible concluir que los filósofos son pelados”, que es básicamente la operación racional que realiza en esta cuestión la ideología Georgemacrista.

Lo que queremos argumentar es que es imposible correlacionar los resultados de las pruebas Aprender con el método Montessori en el subsistema de los jardines maternales y de infantes municipales, porque entre otros problemas técnicos, es solo una parte del sistema cuya supuesta incidencia en las pruebas debería ser tal que diluya la parte correspondiente al subsistema provincial y al subsistema de gestión privada. Por lo tanto es estadísticamente imposible sacar esta conclusión.

Y es otra muestra más del cinismo de un gobierno nacional, provincial y municipal que no solo no construyó una solo escuela nueva, sino que las dejó en estado de mantenimiento crítico, bajó los sueldos docentes y se dedicó durante tres años de estigmatizar a sus organizaciones sindicales.

No es la educación justamente un tema fuerte del macrismo, ni del vidalismo, pero veamos la cuestión del georgemacrismo. Evidentemente nuestras instituciones municipales son muy valoradas en nuestra comunidad, a tal punto que es un pedido recurrente la necesidad de construir nuevos jardines, especialmente los maternales.

Pero esta valoración positiva trasciende al periodo de la implementación del ‘Método Montessori’ y se extiende más allá de los diferentes funcionarios que tuvieron a cargo la educación municipal y más aún, de los propios intendentes. Podríamos decir, sin temor a equivocarnos, que son buenos aun a pesar de ellos. Con Montessori y sin Montessori. Con García y Macri y sin García y Macri.

Pero como vienen insistiendo con esta cantinela del Montessori, veamos un poco la gestión: hay aquí una consultora educativa, Blooming Child, hay empresas dedicadas a vender el material didáctico, y una coordinación del Programa Montessori en la municipalidad, que justamente forma parte de la consultora que vende sus servicios a instituciones educativas y familias.

El circuito se cierra con el mismo Jorge Macri vendiendo el producto, así familias y escuelas se tientan en contratar a la consultoría.

Por qué digámoslo todo, las 10 horas catedra que le paga el municipio por mes para coordinación no representan ni una mínima proporción que la consultora, es decir, ella misma, obtiene de ganancias con un solo curso.

Mientras nuestras escuelas en Vicente López tienen que suspender las clases por falta de calefacción, aquí gastamos los dineros públicos, provinciales y municipales en cursos y materiales didácticos cuyas evaluaciones no existen.

Pero por suerte tenemos los resultados educativos más contundentes en toda la educación del mundo mundial.


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